Encerrados

La cosa va ultimamente de pisos. A mi me lo han dado hace nada y a un amigo se lo van a dar dentro de nada.

Hoy hemos ido a ver su urbanizaci?n, puesto que ya han entregado viviendas, las han entregado pero no vive apenas nadie por que no llevan ni un mes entregadas.

Hemos entrado como las personas, por la puerta del parking e inmediatamente hemos accedido a los jardines, todo muy bonito, muy cuidado. Todo en orden.

Al rato ha llamado un tercer amigo y hemos bajado la urbanizaci?n a su encuentro y despu?s de que entrara por la puerta hemos ido a ver los aparcamientos, al pulsar la luz del portal se ha apagado la de la entrada, ha sonado como un t?rmico ca?a, por cierto, disponen de unas plazas dignas de cualquier Hummer.

Hemos visto los trasteros y hemos comparado la altura de los techos de unos y de otros, una actividad apasionante lo s?, ya me conoc?is, me encantan los deportes de riesgo.

Paseando y disfrutando de las bonitas vistas de un parking recorrimos la urbanizaci?n pero esta vez hacia arriba y por el subsuelo.

Otra cosa que nos apetec?a mucho ver era el ascensor, pues nos hemos hartado de verlo.

6 plazas y 450 kilos, pensamos, este aparato est? preparado, no hay problema. Somos seis y pesamos menos de 450 kilos, adelante.

Planta -2, iniciamos subida, mientras se desarrollaba una agradable conversaci?n acerca de cualquier trivialidad, tipo hoy hemos estado en la inauguraci?n de Ikea.

Planta -1,5, el ascensor deja de moverse, me doy cuenta el primero, pero intento negar la realidad y no digo nada, mi amigo me dice: ?esto se ha parado?, yo le contesto: no, es que va muy lento.

La conversaci?n de las chicas cesa de repente y se percatan de que efectivamente estamos encerrados seis personas en un ascensor de seis personas. Peque?o conato de histeria, por parte de algunas ni?as y un poco por parte m?a.

Consigo sosegarme, no pasa nada, estamos encerrado a la altura de un parking de un edificio donde hay un vecino o ninguno, el timbre con conexi?n telef?nica dice que no es posible en estos momentos establecer la conexi?n telef?nica y para colmo miro mi m?vil y no hay cobertura, que alegr?a.

Cuando mir? el m?vil lo hice de tapadillo y no dije nada de la cobertura, me pareci? m?s prudente.

Pudimos abrir la puerta de dentro sin mayores problemas, es esa que hace de embellecedor y es un poco de pega, la que es digna de una c?rcel es la de fuera, siempre que no llegues al pestillo claro.

?Sab?is?, las puerta de fuera tienen un dispositivo de apertura desde el interior, que suele estar arriba de la misma. Pues el ascensor a quedado de la siguiente forma, nuestro pies a la altura del techo del -2 nuestra cintura a la altura del suelo del -1 y nuestra cabeza pensando en como salir de all?, por lo que no alcanz?bamos al pestillo superior que nos permitir?a salir de nuestro encierro.
Despu?s de un rato pensando, mi idead fue la de cargarme la puerta, unos la apoyaron y otros no, pero visto que no aparec?a nadie, me puse a tirar de ella y conseguimos que cediera un poco, lo justo para ver si pasaba alguien.

Incre?ble, pas? alguien, alguien a la cual fastidiamos, puesto que venia del parking con la compra dispuesta a subir por el ascensor (igual la salvamos) y como no pudo, tuvo que subir por la escaleras.

-Disculpe podr?a echarnos una mano, mire es que nos hemos quedado encerrados aqu? en el ascensor.

-Mira es que voy cargada, un momento ahora bajo.

-No se preocupe que de aqu? no nos vamos, por cierto, traigase un palo de escoba por favor.

A los pocos minutos aparece la muchacha con el que supongo que es su novio y este con un palo de escoba.

Raudo y veloz mete el palo por el hueco que abrimos y sin darme tiempo a explicarle, hace palanca y parte el palo intentando abrir la puerta, yo le digo que as? no, que desenrosque el cepillo y me pase el palo hacia dentro. As? lo hace y una vez el palo dentro y tras unos pocos de intentos conseguimos abrir las puertas del dichoso ascensor.

Antes de salir nadie del ascensor, dice la chica salvadora, “claro, si vais un mont?n de gente dentro que no veas”, yo le digo que vamos seis, lo que marca el ascensor, s?lo faltaba que encima fuera culpa nuestra quedarnos encerrados.

Mientras sal?amos por el hueco, la chica nos animaba diciendo que tuvi?ramos cuidado que el ascensor pod?a bajar y cortarnos por la mitad, como en Speed.

Total una tarde inolvidable.